LA TIERRA,NUESTRA CASA
.-Una casa puede ahorrar hasta 75.000 litros de agua unicamente cerrando los grifos. De 5 a 10 litros van al desagüe cada minuto en que el grifo está abierto para lavarte los dientes, por ejemplo.
Probablemente tu inodoro usa mas agua de la realmente necesaria. Reduce esa cantidad simplemente colocando dentro de la cisterna una botella llena de agua cuidando de no dificultar el mecanismo de la misma.
.-No dejes el motor al ralentí sin necesidad. Al cabo de un minuto es mas económico poner el coche en marcha de nuevo que dejarlo al ralentí.
.-Las pilas botón contienen metales pesados. El mas frecuente es el mercurio, un metal muy tóxico y una fuente importante de contaminación. Devolver las pilas usadas. Existen técnicas para extraer el mercurio y otros metales de las pilas, a fin de volverlo a utilizar.
.-El “corcho blanco” es una espuma de poliestireno expandido. Este material se fabrica con benceno, un reconocido cancerígeno. Los gases que se usan para expandirlo son los llamados CFC, que devoran las moléculas de ozono atmosférico disminuyendo la capa de este en la atmósfera. El corcho blanco no es biodegradable; no desaparece nunca.
.-Los plaguicidas usados en algunos collares antipulgas para animales domésticos les dañan el sistema nervioso. El animal absorbe el producto químico en su cuerpo hasta que sus tejidos exhalan los tóxicos que paralizan a los parásitos. Puedes hacer un antipulgas casero metiendo en la batidora cáscaras de limón o naranja con un poco de agua, hiervelo a fuego lento y cuando se enfríe, frota la pasta resultante sobre la piel del animal.
.-Las nuevas bombillas fluorescentes ahorran mucha electricidad. Con una cuarta parte de potencia genera la misma luz que una bombilla tradicional. Aunque son mas caras, duran unas 10.000 horas, mientras la normal solo unas 750, por lo que necesitarías unas 13 para alumbrar el mismo tiempo de una fluorescente.
.-Muchas de la plantas que se usan en los jardines urbanos no son apropiadas para el clima que tenemos. Si se plantaran variedades autóctonas, de las que poseemos multitud de bellísimos ejemplares, seria posible ahorrar mas de la mitad del agua, mantener mas sanas las plantas y mejorar el estado de la tierra. Este tipo de jardines son prácticos y sumamente satisfactorios desde el punto de vista estético y ecológico. ¿A quien se le fastidiaría el negocio si quitásemos el césped y las plantas de invernadero de nuestras calles y plazas para plantar flora autóctona?.
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